El conflicto entre Rusia y Ucrania ha causado indignación a nivel mundial debido a las muertes y desplazamiento de miles de personas, a esto se suma la escasez de alimentos que se podría enfrentar a nivel mundial por el aumento de precios y la falta de fertilizantes producidos en Rusia y ocupados en varios países.
Sara Menjer, fundadora de Gro Intelligence, una empresa de inteligencia artificial que pronostica los mercados agrícolas mundiales y los efectos del cambio climático, detalla a través de un informe que las consecuencias en tema de alimentación serán catastróficas a nivel mundial.
Una gran parte del trigo, maíz y cebada producida en el mundo proviene de Rusia y Ucrania, al igual que el fertilizante ocupado por el sector agrícola se encuentra en esos países que actualmente se encuentran en conflicto y por esa razón han disminuido la producción y el encarecimiento de estos productos.
Los precios de los alimentos, fertilizantes, petróleo, el gas e incluso los metales como el aluminio, el níquel y el paladio están aumentando a toda prisa y los expertos prevén que la situación empeorará cuando sea imposible mantener un balance entre oferta y demanda.
Serán los países subdesarrollados son los que más resintieran las consecuencias de la escasez de alimentos y el aumento de precios, Menjer afirma que el mundo puede organizar una respuesta integral al hambre.
Estrategias que los gobiernos deberían considerar de acuerdo a Menjer.
- Financiar plenamente el Programa Mundial de Alimentos.
- Aprovechar las reservas de alimentos existentes para ayudar a los países en apuros.
- Evitar las prohibiciones de exportación de alimentos, que ya están socavando el suministro mundial de alimentos.
Además, aseguran que el mundo necesita nuevas inversiones en la transformación de sistemas alimentarios especialmente en la agricultura regenerativa, para que las naciones sean más resistentes a las crisis energéticas, climáticas, sanitarias y geopolíticas.
