La Fiscalía Especializada para la Investigación y Persecución del Delito de Feminicidio, demostró de manera plena la responsabilidad de Andrés “N” en el delito de Feminicidio cometido en el municipio de Puente de Ixtla, por lo que fue condenado a 40 años de prisión.
El 30 de octubre del año 2018, se localizó en un lote baldío entre los ejidos de Ahuehuetzingo y San José Vista Hermosa, Puente de Ixtla, el cuerpo sin vida de una femenina de 30 años de edad y en las inmediaciones se localizó un vehículo tipo taxi con sitio en Puente de Ixtla.
A través de la Fiscalía Especializada se iniciaron las investigaciones aplicando los protocolos correspondientes con perspectiva de género, logrando establecer la presunta responsabilidad de Andrés “N”, quien fuera pareja sentimental de la víctima en la muerte violenta de la femenina.
De acuerdo a los datos de prueba obtenidos, se demostró que la tarde del día 25 de octubre del año 2018, la mujer víctima se encontraba en compañía del sentenciado con quien mantenía una relación de noviazgo.
Ambos se encontraban conversando respecto del embarazo de la víctima, momento en el que comenzaron a discutir y en ese momento el indiciado comenzó a agredir físicamente a la mujer golpeándola en el rostro y en la cabeza, para posteriormente privarla de la vida por asfixia.
El agresor trasladó el cuerpo sin vida de la femenina a bordo del vehículo con placas de circulación 1391-LVD del servicio público, mismo que fue abandonado en el referido en el municipio de Puente de Ixtla, para huir del lugar.
Derivado de lo anterior, el Ministerio Público especializado obtuvo la respectiva orden de aprehensión en contra del presunto responsable, ejecutando el mandato judicial agentes investigadores en contra de Andrés “N” alias “El Quesos” de 33 años de edad, quien había sido detenido en posesión de en posesión de droga y dos armas punzo-cortantes.
La Fiscalía Especializada para la Investigación y Persecución del Delito de Feminicidio desahogó los alegatos de clausura ante la justicia oral, emitiéndose un fallo condenatorio por unanimidad, imponiendo en contra de Andrés una pena privativa de la libertad de 40 años de prisión y al pago por concepto de reparación del daño moral y material
