Karina Badilla Castillo, de 23 años, salió de fiesta el sábado por la noche, en Hermosillo, Sonora. La madrugada del domingo pidió un Uber para regresar a su casa, horas después su cuerpo fue encontrado sin vida.
A través de redes sociales la familia de Karina denunció que la joven fue hallada con signos de violencia sexual después de abordar un Uber.
Sin embargo, la empresa de transporte privado aseguró a través de un comunicado que no se tiene ningún registro del un viaje realizado con la aplicación con la fecha y datos de Karina.
“Después de realizar las investigaciones correspondientes podemos confirmar que, con la información disponible, no existe registro de un viaje realizado a través de la aplicación que corresponda con dichos datos”.
Karina era mamá de dos niños de tres y seis años, acudió a una fiesta el sábado y fue asesinada cuando iba de regreso a su casa.
El cuerpo de Karina fue hallado en un terreno baldío de la colonia Quinta Esmeralda en Hermosillo.
