La Agencia de Protección del Medio Ambiente de Estados Unidos advirtió que los suavizantes pueden afectar la salud debido a su constante uso.
A las personas les encanta que sus prendas tenga un aroma, por eso usan los suavizantes, pero las sustancias que los componen son químicos “bastante peligrosos” en mayor medida para los niños.
Los efectos perjudiciales no siempre son visibles o de forma inmediata, principalmente, se presentan problemas respiratorios y afecciones dermatológicas como reacción al contacto directo o indirecto.
Emitieron una lista de las sustancias dañinas que contienen estos productos.
Los síntomas que pueden provocar son:
-Somnolencia o fatiga
-Mareos, vómitos y náuseas
-Enrojecimiento de piel y ojos
-Las dificultades respiratorias
-El dolor de garganta
-Anemia
Las sustancias dañinas son:
El alfa-terpineol, un líquido incoloro y combustible cuyo aroma a lila se utiliza para dar fragancia a los suavizantes de tela.
El acetato de bencilo también es un líquido incoloro que tiene una fragancia similar al jazmín y puede provocar intoxicación, según la Organización Mundial de la Salud.
El alcohol bencílico es una sustancia incolora que tiene un aroma de diversas plantas y flores.
El acetato de etilo es un líquido de olor dulce que se usa como solvente y agente aromático.
El cloroformo es un líquido denso de olor ligero que, según un informe del Departamento de Salud de Nueva Jersey en Estados Unidos, es cancerígeno.
El terpinoleno este líquido tiene olor cítrico.
A estos productos se les adjudican el desarrollo de estos trastornos:
-Desequilibrios en el sistema nervioso central
-Hipotermia
-Dolores de cabeza continuos
-Depresión y ansiedad
-Pérdida de la coordinación muscular
-Irritaciones
-Daño renal y hepático
-Trastornos cardíacos
Cabe señalar que las compañías realizan campañas publicitarias ‘engañosas’ que promueven a estos productos como esenciales para la familia; por lo cual se recomienda revisar sus compuestos o recurrir a alternativas más amigables con el medio ambiente como el vinagre de manzana y el bicarbonato de sodio.
