Aunque parezca un título tendencioso y te pudiste asustar por ello, lo cierto es que en efecto, la soltería podría matarte más rápido que la obesidad.
No está mal ser soltero, de hecho es señal de madurez emocional y estabilidad, pues tener una pareja a tu lado no es la solución a todo; la clave es rodearte y mantenerte de tus amigos y familia.
El problema radica cuando la soltería se torna en soledad, más bien, quien está en aislamiento emocional tiene más probabilidad de morir antes que una persona con obesidad.
De acuerdo con investigadores de Estados Unidos, quienes realizaron 218 estudios de los efectos de la soledad y el aislamiento en la salud, se llegó a esta desafortunada conclusión.
Los solteros tienen un riesgo de muerte de 50 por ciento; en comparación, el riesgo por obesidad fue solo del 30 por ciento.
El doctor Dhruv Khullar, investigador de Weill Cornell Medicine en Nueva York, dijo que hay evidencias significativas de que las personas que se encuentran sociablemente aisladas, experimentan de trastorno del sueño, respuestas inmunes anormales y un deterioro cognitivo acelerado.
Mientras que la autora principal del estudio, y profesora de psicología en la Universidad de Brigham Young, Julianne Holt-Lunstad, dice que estar conectado socialmente con otros es considerado una necesidad humana fundamental y crucial para el bienestar y la supervivencia.
En pocas palabras, la solución no es necesariamente tener pareja, lo importante es que este hecho no te aísle de tus seres queridos y tómalo con una oportunidad para encontrarte a ti mismo o misma.
